En una entrevista con Contingencia Chile, Pablo Maltés, candidato a alcalde por La Pintana, compartió su visión para transformar la comuna. Maltés, quien tiene una larga trayectoria trabajando con la comunidad, apuesta «por un enfoque integral que aborde las principales carencias de La Pintana y mejore la calidad de vida de sus habitantes».
- Pablo, a su juicio, ¿Cuáles son los principales problemas que enfrenta La Pintana y cómo piensa abordarlos si es elegido alcalde?
La Pintana enfrenta desafíos importantes en términos de infraestructura, seguridad y servicios básicos. Por ejemplo, con casi 190.000 habitantes, solo tenemos 35 semáforos, lo cual es claramente insuficiente para una comuna de este tamaño. En términos de salud, hay apenas cuatro consultorios y un centro de salud mental, lo que no cubre las necesidades de la población. Mi plan es mejorar estos aspectos críticos invirtiendo en infraestructura, aumentando el número de semáforos, centros de salud y también mejorando la calidad de las áreas verdes para que sean espacios seguros y agradables para todos. Mi visión se enmarca en el concepto de «La Pintana sin miedo», donde nuestros vecinos puedan vivir y desarrollarse sin temor a la delincuencia ni a la falta de oportunidades.
- ¿Qué medidas propone para mejorar la seguridad?
La seguridad es una preocupación central para los vecinos de La Pintana. No se trata solo de aumentar la presencia policial, aunque eso es importante, sino de una estrategia más amplia. Proponemos mejorar la iluminación pública, instalar cámaras de vigilancia en puntos críticos y aumentar el número de vehículos de patrullaje en la comuna. Actualmente, contamos con solo cinco camionetas para patrullar una población de casi 200.000 personas. Además, queremos trabajar en estrecha colaboración con las fuerzas de seguridad, como Carabineros y la PDI, para implementar un enfoque coordinado en la lucha contra el crimen. Queremos a «La Pintana sin miedo», donde los vecinos puedan caminar tranquilos por sus calles y disfrutar de sus espacios públicos.
- Dice que la educación es un tema central en su propuesta. ¿Qué planes tiene para mejorar las oportunidades educativas en La Pintana?
Es fundamental que nuestros jóvenes tengan acceso a una educación de calidad sin tener que abandonar la comuna. En La Pintana no tenemos institutos profesionales ni universidades propias, lo que obliga a muchos estudiantes a trasladarse a otras comunas, aumentando los costos y las dificultades. Mi plan incluye atraer instituciones educativas para que establezcan sedes en La Pintana, ofreciendo programas técnicos y universitarios. También quiero fomentar el desarrollo de programas de formación profesional para adultos, ayudando a aquellos que deseen mejorar sus habilidades y oportunidades laborales.
- ¿Cómo se aborda la estigmatización y la percepción de la comuna?
La estigmatización de La Pintana es un problema serio que afecta la autoestima de nuestros vecinos y limita las oportunidades de desarrollo. Mi enfoque es cambiar esta narrativa mostrando el verdadero potencial de la comuna. Tenemos grandes extensiones de terreno disponible que pueden ser usadas para proyectos que beneficien a las familias de La Pintana. También queremos destacar los aspectos positivos de nuestra comunidad, como nuestra rica vida cultural y social, y atraer inversión privada que vea el potencial de nuestra gente. Es fundamental dignificar a nuestros vecinos, tratándolos con respeto y proporcionando las oportunidades que merecen para mejorar su calidad de vida.
- ¿Qué mensaje le gustaría dar a los votantes de La Pintana?
Quiero decirles que conozco las necesidades y aspiraciones de la gente de La Pintana porque he estado involucrado en la comunidad por muchos años. Creo firmemente que con una buena gestión municipal, podemos transformar nuestra comuna en un lugar donde todos se sientan seguros, valorados y con oportunidades para prosperar. Invito a todos los vecinos a unirse a este proyecto de cambio, a que trabajemos juntos por una Pintana digna, próspera y justa para todos. Este es el momento de construir una «La Pintana sin miedo», donde cada uno de nosotros pueda vivir y soñar sin limitaciones.
